Recuerda: lo escoges, él no te escoge a ti
Al salir por la puerta se detuvo y dijo que lo sentía y que se lo compensaría esta noche. sonrió y él se inclinó y le dio un beso apasionadísimo. No un beso de despedida, sino más bien un profundo beso francés a fin de que volviera a empezar.